miércoles, 13 de octubre de 2010

QUO VADIS, ESPAÑA?


En España todo se confunde y se confunde por más tiempo y en mayor intensidad que cualquier comparación de su entorno. Defensa atribuye los abucheos al Presidente Zapatero, en el Desfile de las Fuerzas Armadas, a grupos organizados a través de redes sociales orquestadas en Internet. ¿Los mismos, tal vez, que les auparon a ellos al Gobierno o, quizá, otros exactamente simétricos a aquéllos? ¿Ayer, nada más era el Día de las Fuerzas Armadas? El Rey y el Príncipe molestos por la falta de sensibilidad hacia, dicen, los Caídos. ¿Caídos, por quién y para qué?, en este importante acto. Cinco millones de parados. Una situación económica catastrófica. Unas perspectivas de futuro tenebrosas. La significativa ausencia de Venezuela que menosprecia la necesidad española de crudo, al desquite desde la llamada al orden del Rey, en su día. ¿Quo vadis, España?.

En España nadie agarra el toro por los cuernos. Excepto los nacionalistas que lo prohíben en Cataluña, como prohíben todo lo español, sea esto, lo otro o la lengua, conculcando derechos, torciendo leyes, pervirtiendo la realidad, obnubilando conciencias, aplastando sentimientos de pertenencia. ¿Acaso la fina sensibilidad de la Corona es receptiva y se manifiesta en este estado de cosas?.

La Corona es silente en lo sustantivo y acomodaticia en lo adjetivo. ¿Se debe esperar más de ella? ¿Se le puede esperar más?. Es, éste, uno de tantos toros pendiente de poder agarrarse por los cuernos o de aguardar la llegada del cabestro que lo devuelva al toril. Es decir, que esta alta institución del Estado pueda ser sometida a crítica. Una crítica ponderada y no más respetuosa que con las mismas premisas exigidas para cualquier otra crítica razonable de objetos o instancias políticas. ¿O pretendemos que la Jefatura del Estado sea un coto privado?. Existe un cuidado especial, un consenso implícito, no escrito, ni siquiera manifestado, generalizado en los Medios y en los Poderes públicos, para mantenerla al cobijo de los puntos de mira propios de la intemperie.

¿Quizá se teme que lo que hoy son abucheos e insultos a Zapatero devengan mañana insultos al Rey, Príncipe y Corona si se rompe este criptoconsenso, este pacto en la sombra?. Quizá, quizá, quizá...como dice el bolero.
ULISES-TURKANA